La arquitectura no solo cuenta con obras importantes y emblemáticas, sino que en cualquier rincón podemos encontrar un edificio que nos llame la atención.
Por ello, mientras preparo el próximo post –en el que os mostraré una de las obras más famosas de la arquitectura moderna-, os quería enseñar esta pequeña casita en la Isla de Captiva.
Parada obligatoria en la Ruta por Florida
Hace unas semanas os contaba nuestra Ruta por Florida, que fue un viaje muy divertido y lleno de momentos inolvidables [ver aquí]. ¿Recordáis cuando os recomendé ir a ver delfines salvajes? [Captiva Cruises] Pues fue así como descubrimos la Isla de Captiva, un lugar idílico donde no estaría nada mal pasar una temporada.
Allí pudimos ver una de las puestas de sol más bonitas del viaje, además de comer en un restaurante completamente forrado de dólares. ¿No me creéis? Pues buscad la Cantina Captiva, y veréis como este mejicano no deja indiferente a nadie.
De hecho, fue cuando íbamos de camino a este restaurante cuando encontramos la puerta rosa.
Captiva Island, un lugar que transmite buen rollo
Eso es lo que me pareció la Isla de Captiva, y por ello quería compartirlo con vosotros. A mí me lo recuerda esta foto, pero seguro que los surfistas y sus gentes también tuvieron mucho que ver. Aunque ahora que lo pienso, puede que los 27 grados en Diciembre también ayudaran bastante…
Así que lo dicho, os dejo con la puerta rosa mientras sigo con el próximo post. Si por casualidad acabáis visitando la Isla de Captiva, estoy segura de que la encontraréis.
¿Alguna pista sobre qual será el siguiente post?
Solo diré que está cerca de Chicago, y estoy segura de que te va a encantar…