Scottish Borders, Escocia [1240]
Ya hace un tiempo que quiero mostraros alguna visita diferente de las que hasta ahora he publicado. Se trata de ésos lugares que, sin ser un hito en el mundo de la arquitectura, nos seducen y cautivan de una manera difícil de explicar. Ya sea por su historia, su emplazamiento, su arquitectura, o la unión de todo eso y más, estos puntos se convierten en visitas especiales.
Por ello os quiero mostrar uno de mis últimos hallazgos, un espectacular castillo situado en la región escocesa de The Borders -justo tras la frontera con Inglaterra-, el Hermitage Castle.
No sé si será porque fue el primero que pudimos ver, o si fue por el alivio de abandonar las tortuosas carreteras que llevan hasta él, pero he de reconocer que es uno de los castillos que más me impresionó. Quizá fueron sus imponentes fachadas, la vasta pradera llena de flores silvestres que lo rodea, o simplemente la soledad que se respira en su entorno, pero lo cierto es que me emocionó desde el primer momento.
No os aburriré con mucha historia, pero creo que hay algunos detalles interesantes que marcaron su pasado y que merece la pena mencionar.
A pesar del ambiente bucólico y romántico que desprende hoy en día el Hermitage Castle, hubo un momento de la historia en que éste fue el lugar desde el que se vigilaba el valle más sangriento del Reino Unido. Se cree que lo fundó Sir Nicholas de Soules alrededor de 1240, y su cercana situación a la frontera con Inglaterra lo convirtió en un lugar estratégico. Por este motivo, durante las Guerras de Independencia de Escocia el castillo cambió de manos en diversas ocasiones, ya que tanto Ingleses como Escoceses conocían su importancia. Esto marcó su carácter, y es que todavía hoy podemos ver la espectacular fuerza que desprende esta fortaleza defensiva, casi impenetrable gracias a los enormes muros que han sobrevivido durante siglos.
Pero el Hermitage Castle no tan solo esconde una historia turbulenta y sangrienta, sino que también tiene un pasado romántico. Fue en él donde María Estuardo, Reina de Escocia, visitó al entonces su amante James Hepburn, IV Conde de Bothwell, después de que éste resultara herido en una disputa. Este arrebato le supuso a María Estuardo que muchos de sus partidarios se volvieran en su contra, y se dice que aún hoy aparece el espíritu de la reina de Escocia por las ruinas del castillo.
Son muchas las historias y leyendas que acompañan al Hermitage Castle, que tiene la reputación de ser uno de los castillos más encantados del Reino Unido. Entre ellas aparecen rituales de magia negra, asesinatos, desapariciones de niños, historias de gigantes… Seguro que todo ello tiene mucho que ver con los supuestos sucesos paranormales que se han registrado durante los últimos años, pero nosotros lo vamos a dejar aquí.
Lo que sí es cierto es que en el siglo XIX el famoso escritor Sir Walter Scott se fijó en el Hermitage Castle, delante del cual se hizo retratar. A lo largo de su vida, Sir Walter Scott ensalzó la historia de su querida nación en sus escritos, con lo que suscitó un enorme interés por el patrimonio histórico de Escocia. De esta manera los escoceses, orgullosos de su pasado, empezaron a recuperar algunas de sus construcciones abandonadas más importantes. Fue entonces cuando el Hermitage Castle fue parcialmente restaurado, ayudando a que éste sea hoy uno de los castillos que mejor se conserva en la zona.
Y para acabar, os quiero mostrar las imágenes que tomé en las ruinas de la cercana capilla del Hermitage Castle, del siglo XIV. No se conserva mucho de ella, tan solo los muros perimetrales, algunos arcos ojivales, y un pequeño cementerio a la sombra de un espectacular árbol, aunque eso no impide que sea un lugar mágico.
Juzgad vosotros mismos.
¡Espectacular!
Gracias Helena como siempre hermosas fotografías.
¡Muchas gracias Mary! Te agradezco el cariño con el que lees cada post. Un abrazo!